Qué ver y hacer en Railay, la península más bonita de Tailandia

Tailandia, el país de las sonrisas, es un paraíso para los sentidos, con espectaculares templos, gente acogedora, deliciosa comida y por supuesto, sus playas. Y para que disfrutéis de ellas, os voy a descubrir que ver y hacer en Railay, una de las grandes joyas de Tailandia.

Muchos turistas van a las islas más recónditas en busca de la paz y tranquilidad, pero que requiere de más tiempo para llegar. Railay es una opción más accesible, una bella península rodeada de rincones idílicos, a poca distancia de Krabi pero afortunadamente todavía sin el turismo desaforado de otros lugares como Ao Nang o Phuket. ¡Acompáñame a descubrir 12 cosas que ver y hacer en Railay!

Dónde está y cómo llegar a Railay 

Railay está situado a escasos 3 km del puerto de Aon Nang y unos 26 km del aeropuerto de Krabi, uno de los principales del sur de Tailandia. El acceso a Railay es exclusivamente por barca. La manera más fácil de llegar es en un vuelo a Krabi y desde allí desplazarnos al puerto de Ao Nang.

Desde el aeropuerto de Krabi

Salen furgonetas frecuentemente hacia el embarcadero de Aon Nang, haciendo varias paradas. No es la forma más cómoda de llegar pero sí la más económica (150 bath/persona). Otra opción más rápida es ir en taxi (500-600 baths) y en apenas 25 minutos llegarás al puerto. Desde allí parten continuamente longtails, los típicos botes tailandeses, con dirección a Railay East.

El trayecto en barco dura 20 minutos y cuesta 150 baths. Tened en cuenta que os podéis mojar con el agua que entra pero resulta realmente divertido.  De hecho, el viaje en sí mismo es una auténtica maravilla, bordeando los acantilados hasta acceder al manglar de esa parte de la isla. Si llegas con marea alta es muy probable que te mojes los pies, así que mejor que vayas con pantalón corto.

Viajar a Phuket

se puede hacer en el ferry que sale diariamente a las 15:15 (2 horas) siempre que el mar lo permita. Si no, hay que ir por tierra y el trayecto es más largo (3:30 hr). En ese caso se viaja en bote a Ao Nang y desde allí trasfieren a los viajeros a una furgoneta que les transporta hasta la misma puerta del hotel.

Esta realiza una parada para descansar y también lleva a los viajeros que lo deseen al aeropuerto. Los billetes para ambos los venden en las agencias de turismo de Railay por un precio de unos 600 baths.

🏆12 COSAS QUE VER Y HACER EN RAILAY

Railay beach (West)

Es la playa más grande de Railay, y la que da nombre a la Península. Unos 500 metros de arena fina con hermosos acantilados y unas vistas fantásticas del mar de Andamán. A lo largo de toda la playa hay bastantes bares y restaurantes para refrescarse a pocos metros del mar. No es una playa nada masificada y el agua está muy limpia.

Phra Nang Beach

Esta playa al este de la isla parte desde la cueva de Phra Nang, famosa por su colección de falos. Allí los pescadores hacen ofrendas a los falos de Shiva antes de salir a faenar para asegurarse mejores capturas y protegerles del mar. Según una leyenda local, allí también vivía una princesa del mar.

Cuando sube la marea el espacio de arena se reduce a una pequeña franja de arena pero con marea baja es preciosa y tiene las mejores vistas a los islotes. Para acceder hay que ir por el camino en dirección a la cueva, pasando por las paredes donde están practicando escalada. Hay un par de restaurantes para comer con vistas a la playa.

Practicar escalada

Railay es considerado como uno de los mejores sitios de Tailandia para la escalada. Hay varias agencias locales que se proporcionan material y monitores. Uno de los lugares más fáciles es precisamente el camino para acceder a Phra Nang Cave.

Allí tienen instaladas varias vías de diferente complejidad. Los escaladores más experimentados prefieren la zona de Tonsai, donde hay más y mejores rutas de escalada.

Subir a la laguna

Una excursión tan popular como peligrosa es la ascensión a la laguna. Se trata de una pequeña poza situada en la parte este de la isla. Para llegar hay que subir por una pendiente con la ayuda de cuerdas y, posteriormente, descender hasta la pequeña laguna de color esmeralda con mucha pericia.

En ocasiones la laguna está seca, pero las panorámicas que hay desde la cima son impagables. La ruta sale desde el camino que conduce a la cueva de Phra Nang.

Hacer kayak

La zona del mar de Andaman no es la mejor para practicar buceo o snorkel y menos aún durante la temporada estival. Sin embargo, se pueden practicar otros deportes acuáticos como kayak. La mejor zona para practicarlo es en Railay East, ya que está más protegida de las olas.

Visitar la isla Hong

Es una isla con una preciosa playa con aguas de color esmeralda.  Desde Railay se tarda aproximadamente una hora en llegar y en los tours organizados te dejan disfrutar de unas dos horas. Desafortunadamente es también una de las excursiones más famosas desde Phuket, lo que ha llevado a que haya también bastante más gente.

Hacer un crucero por las islas cercanas

La excursión más popular desde Railay es la que visita las paradisíacas islas que hay frente a la península. Generalmente todas las agencias locales organizan los mismos tours, con parada en las islas Poda, Tup y Koh Kai. La isla de Poda es un fantástico lugar para tomar el sol y pasear por los alrededores.

Allí se para unas 2 horas para relajarse y disfrutar del lugar. Posteriormente, el bote se acerca a la isla de Koh Kai o Chicken Island, llamada así por un peñasco de la isla que recuerda a la cabeza de un pollo. No se para en la isla, simplemente se acercan hasta ver el famoso “pollo” y se continúa hasta la isla de Tup.

Ésta es verdaderamente espectacular, pero no esperéis estar solos. Son dos islotes separados por un banco de arena. Allí se para alrededor de una hora para pegarse un baño. Finalmente los botes se dirigen a otro punto para hacer snorkel.

Diamond Cave

Horario: 8:00-17:30 (100 baths)

La Cueva del Diamante no es lugar apenas visitado por los turistas pero posee unas preciosas paredes con estalactitas. La cueva no es muy grande y se visita en apenas 15 minutos. Aún así, realmente merece la pena acercarse y disfrutar de esta preciosa cueva para nosotros solos. 

Muay Thay

Todos los días organizan un espectáculo de Muay Thai a las 22:30 en The Last Bar, Railay East. A pesar de que no soy muy fan de los deportes de lucha reconozco que disfruté de un espectáculo de Muay Thai  hecho a mi medida.

No es un combate en el que se peguen una paliza -lo cual agradecí- y honestamente creo que más bien es una especie de exhibición en la que simulan un combate. Dicho esto, permite ver a pie de pista los rápidos movimientos de los luchadores mientras te tomas una cerveza. Los tickets son realmente baratos (100 baths) y también ofrecen clases de Muay Thai a las 8:00 y 18:00.

Disfrutar con la gastronomía local

No digo nada nuevo alabando la gastronomía tailandesa, pero comer un pescado del día frente al mar es el final perfecto para una jornada de playa. Uno de los mejores frente a la playa de Railay es “El Gran Pescador”. En Railay East mi preferido es el restaurante del Hotel Avatar.  

Cocina excelente a precios muy asequibles. En la playa Phra Nang el restaurante Grotto tiene una ubicación excepcional y una cocina de calidad. Tampoco podéis perderos los deliciosos zumos tropicales que encontraréis en muchos de los chiringuitos.

Masajes

Probablemente suene manido recordar los masajes tailandeses pero es un placer al que no renuncio y menos aún en la playa. Hay varios sitios de masajes pero personalmente me gustó la atención que recibí en el Radarom Spa.

Mearse de risa con los monos

Una de las sorpresas que se encuentran los turistas en Railay son los monos que hay en algunas zonas de la isla. Hay algunas colonias realmente grandes y resultan muy graciosos siempre que se cuiden las pertenencias. Hay que tener especial cuidado si se lleva algo de comida o bebida.

A dónde NO ir (sin decepcionarse)

Isla Phi Phi

La isla Phi Phi representa la degradación de un paraíso por el turismo desmedido. La fama alcanzada por la película “La Playa” de Leonardo di Caprio contribuyó a popularizar el sitio y su consecuente deterioro. Debido al excesivo número de botes se destruyó el fondo marino y el gobierno tailandés ha tenido que tomar severas medidas para recuperar el ecosistema.

A partir del 2018 se cerró el acceso a la isla de manera indefinida y los botes no podrán anclar más allí. Esperemos que esto contribuya a recuperar en parte los fondos marinos.